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lunes, 5 de enero de 2009

Del Bien


Del Bien.
Por: Jesús Moisés Delcid Robles

Muchas veces hacemos distinción del bien y del mal. Incumbe al hombre este tema ya que todo aquello que obtiene de sus actos representa un bien particular y por tanto apetecible a su deseo de gozarlo. Pero es importante en nuestros días el entender a profundidad acerca de los bienes que deseamos, ya que en la actualidad se presenta la facilidad de obtener al alcance de la mano muchas cosas que deseamos. Pero habrá que discernir si en verdad dichos bienes representan un verdadero beneficio a nuestra plenitud y formación humana.

El bien es una dimensión esencial del ser humano, ya que el hombre es bueno por que tiene la capacidad de vivir, los entes que existen en nuestro universo tienen bondad ya que son tan perfectos como materialmente pueden serlo y es evidente por que tiene la capacidad de estar insertos en la realidad, y se encuentran en un orden universal. Por estas razones se demuestra someramente que el hombre tiene bondad existencial.

Si la verdad es aspiración suprema del hombre, es porque se convierte en bien. El hombre que aspira a la verdad aspira a un ideal supremo aspira al bien absoluto ya que si el alimento nutre al cuerpo, la verdad nutre al espíritu. Y el hombre siempre aspira a descubrirla y alcanzarla. El hombre busca el bien por ser perfecto, y por que perfecciona a su naturaleza humana, ya que el hombre al reconocer y comprender su naturaleza obviamente actúa como lo que es un ser humano. También cuando un hombre reconoce el valor trascendental del bien tiende a perfeccionar su ser con el bien que representan las virtudes humanas en sus actos humanos. Por ello cuida de no realizar un bien cualquiera, sino realiza y adquiere bienes que verdaderamente desarrolle y eleve su dignidad humana.

A la presencia universal del bien respondemos con nuestro apetito innato. Por su naturaleza benéfica el hombre tiende a la bondad, pero es por su libre albedrío y por su voluntad propia en que dirige sus actos en acercarse o alejarse al bien. Por ser un ente imperfecto el hombre tiene la capacidad de errar y desviarse del verdadero bien, pero también tiene la responsabilidad de rectificar su camino y el reflexionar sobre sus bienes.

Hay bienes que no apetecemos en sí y por sí, sino como medios para otros fines. Se trata de bienes útiles. Otros bienes, en cambio, los apetecemos en sí, pero no por sí, sino como algo que siguen y dependen del fin. Estos son los bienes deleitables. (1)
Pero hay también un bien apetecible y apetecido en sí y por sí mismo, el fin o bien absoluto(1)

Lo que busca cada hombre directa o indirectamente es su fin ultimo que es la felicidad, pero esta suele ser mundanamente imperfecta, cada bien al que tiende el hombre aspira a un trasfondo de felicidad, busca la seguridad y la certidumbre que humanamente carece por su naturaleza, busca la plenitud de su ser, busca lo perfecto.

(¡) Filosofía del Quijote
Agustín Basave Fernandez.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

LA ENTRADA TRATA SOBRE EL LIBRO DE BASAVE FERNANDEZ O NADA MAS ES UNA PEQUEÑA CITA DEL LIBRO¿?

moises dijo...

Hay bienes que no apetecemos en sí y por sí, sino como medios para otros fines. Se trata de bienes útiles. Otros bienes, en cambio, los apetecemos en sí, pero no por sí, sino como algo que siguen y dependen del fin. Estos son los bienes deleitables. (1)
Pero hay también un bien apetecible y apetecido en sí y por sí mismo, el fin o bien absoluto(1)

(¡) Filosofía del Quijote
Agustín Basave Fernandez.

Anónimo dijo...

¿Por qué nos has seguido escribiendo?. Tus artículos son muy buenos.